El diario The New York Times publicó una crónica en la que describe las paradojas derivadas de la situación económica en nuestro país dentro de un escenario de crisis financiera en vías de solución, y pone principal acento en lo que considera un “fenómeno inesperado” que, afirma, “está emergiendo en las calles de Buenos Aires: una floreciente escena gastronómica”. Esto es, dentro de una elevada inflación los restaurantes “están llenos”.

Crisis inflacionaria: cómo manejar las finanzas personales de una manera óptima

Se refiere el periódico neoyorquino en tono de crítica, a “cómo en medio de la incertidumbre económica, los porteños se apresuran a ‘quemar’ sus pesos antes de que pierdan aún más valor, lo que estaría derivando en un resurgimiento de nuevas tendencias y locales gastronómicos”.

Y agrega: “en medio de la agitación económica, Buenos Aires está dando vida a una escena culinaria que compite con las mejores del mundo. Este fenómeno podría parecer sorprendente, pero es la respuesta directa a la crisis financiera que asola al país”. Y remarca la situación con un ejemplo. La crónica cita el caso de Pedro Díaz Flores, uno de los copropietarios de un reconocido restaurante, el “decimoséptimo establecimiento gastronómico que abre en Buenos Aires en los últimos 18 meses”, y quien destaca la apuesta que están haciendo por la oportunidad que brinda “el panorama gastronómico en la Argentina”.

Pobreza e inflación, emparentadas pero diferentes

“Con una inflación que supera el 114%, ubicándose como la cuarta tasa más alta del mundo, y el peso argentino desplomándose, con una caída del 25% en tan solo tres semanas en abril, los argentinos sienten la urgencia de deshacerse de su moneda antes de que pierda aún más valor”, es la síntesis del fenómeno que plantea la publicación.

La crónica concluye: “para los miembros de la clase media, en particular, gastos como las vacaciones o un coche han quedado fuera de su alcance, por lo que se dan otros gustos”, lo que explicaría, según el NYT, porque para algunos funcionarios del Gobierno no existe la crisis económica en la Argentina al sostener que el consumo sigue en alza.